AHIMSA

Principio de No Violencia

Por Jñana Dakini

El Yoga es una herramienta para aliviar el sufrimiento físico, mental y emocional.  Conduce a los seres a conectar con estados de paz y calma. Sin embargo estos estados mentales van y vienen, suben y bajan. Nos podemos sentir dichosos después de una clase de yoga para casi inmediatamente después, hablar o pensar con rudeza, responder con enojo, pensar que “el otro” no nos gusta o permanecer indiferentes ante el sufrimiento de quienes nos rodean.

Los preceptos éticos del yoga son un recordatorio esencial para que el practicante de yoga no sólo practique asanas, sino para que su transformación se manifieste en su conducta hacia los demás y hacia el entorno, que lleve paz, salud y felicidad al mundo de afuera.

Uno de los preceptos éticos mas importantes es el precepto ético de No Violencia: Ahimsa.

AHIMSA, en sánscrito significa No Violencia. Este concepto surge desde la cultura Védica y se menciona en los textos llamados Upanishads, pero cobra gran importancia dentro del Jainismo, Budismo e Hinduismo.

Dentro del Jainismo es Mahavira (599-527 adc), cuyo nombre significa “Gran Héroe”, quien enfatiza la práctica de Ahimsa al grado de no matar ni siquiera a un insecto: “Todos los seres que existen y respiran no deben ser tratados con violencia ni ser atormentados ni ser sujetos de abuso. La no violencia y la bondad a todos los seres es bondad hacia uno mismo.”

En la época de auge del Jainismo, sus practicantes cuidaban al caminar para no pisar ningún ser vivo, y en lugares donde abundaban los mosquitos se tapaban la boca para evitar que al hablar entraran estos a sus bocas y murieran.

Buda Gautama (563-483 adc), añadió al concepto de Ahimsa, el concepto y práctica de Metta (amor incondicional). No es suficiente con ser pacifico o no violento, sino es necesario nuestro pensar y actuar sea una ola de amabilidad, bondad, amor y compasión de forma genuina y constante. El budismo se ha centrado desde entonces en la práctica de Metta como expresión profunda de Ahimsa, por lo cual, el budismo más que una religión, se ha convertido en una práctica de transformación hacia la paz y la bondad.

El Karanya Metta Sutta (Sutra del Amor Incondicional), es una de las enseñanzas más nobles que dejó Buda Gautama en torno a la no violencia y es la base para la práctica de la Meditación de Metta Bhavana o práctica de Amor Incondicional.

Karaniyametta sutta

(fragmento)

Que todos los seres sean felices y estén seguros.

Que todos los seres sean felices en el fondo de su corazón.

Y piensa en todos los seres sin excepción,

El débil y el fuerte,

Desde el más pequeño hasta el más grande,

Los que se pueden ver y los que no pueden,

Los que estén cerca y los que estén lejos,

Los que ya han nacido o los que están por nacer,

Que todos los seres sean felices en el fondo de su corazón.

UN EJMPLO MAS DE PRACTICA DE NO VIOLENCIA

Dentro del Hinduismo, ha sido Gandhi el ejemplo contundente de la práctica de no violencia, sus acciones cambiaron el rumbo de la historia de India y su acción inspiró a otros líderes como: Martin Luther King, Nelson Mandela y la creación del entrenamiento en “Comunicación no violenta” de Marshall Rosenberg.

Las frases de No violencia en sus discursos siguen siendo una inspiración:

“La humanidad no puede liberarse de la violencia mas que a través de  la No violencia. Ojo por ojo y el mundo quedará ciego”.

Que nuestra vida se impregne de amor.